
Desde el 22 al 27 de febrero el país se sume en una suerte de carnaval. Luces, música, escenarios con tecnología de punta, grandes figuras visitando nuestra patria,competencia de trajes y brillos.
Punto destacado son las candidatas a reinas que , muchas de ellas , sin pudor alguno intentan ganar el cetro, que las hará sentir "soberanas" con todos los medios de comunicación encima encargados de hacerlas vivir el cuento de hadas, por las horas que quedan de festival. Todo ello montado por un grupo de periodistas ávidos de informar los últimos movimientos de cada "estrella o diva" que sacará como dividendo el alcanzar la fama.
Es que no es menor el insentivo que el Festival ofrece, nada menos que la herencia de ser instaladas en pantalla de un salto para ser reconocidas en el tiempo por su trabajo señalado como "profesión".
En esta lógica entramos durante varios días, horas y horas de programas televisivos dedicado a informar lo que pasó , lo que no se vió , quien arribó, que comió , con quien durmió, quien llevó más premios y todas las sandeses imaginables que puedan despertar el morbo colectivo.
Un verdadero circo romano , planificado a más no poder, sobre conceptos mercantiles por sobre la calidad de algunos que son puestos en "la parrilla" como la más topissimo por los premios traidos bajo el brazo como carta de presentación , que incluso le dan derecho a "ser jurados" sin necesidad de tener "oido musical"
En esa lógica somos arrastrados , porque no hay nada más importante que Viña y su mega evento anunciado con meses de anticipación como un imperdible de epoca estival.
Chile tiene Festival y eso vende. Por algunos días nos hacen olvidar la delincuencia, la corrupción, las estafas, los accidentes, las empresas coludidas, y todo aquello que nos llena de temor y estupor por la magnitud con que ello es presentado al enterarnos de lo que son capaces los involucrados .
Por varios días entramos en una "catarsis festivalera" que casualmente nos ayudará a bajar los niveles de angustia que nos han enseñado a aflorar porque se aproxima Marzo.
Así vamos surcando el mar de lo insípido irrisorio, vanal , que dan cuenta de lo fugaces y superficiales que podemos llegar a ser al estar superitados a los medios de comunicación.
Es que nos tienen de rodillas, porque estoy segura que una vez se apaguen las luces televisivas ya nadie más recordará los ganadores ni menos los títulos de las canciones y ni hablar de los temas flolcloricos porque eso si que es el peor desprecio para nuestras raices...
En resumen, nadie puede negar que el Festival nos provoca una suerte de "placer y encantamiento " instalado en el anima del pueblo , que ruge con fuerza para hacerse notar si está agradado o no, con el producto que ha comprado para su placer y que nosotros los televidentes comentamos al día siguiente en acalorados discurso según nuestro parecer frente a lo que hemos visto hasta altas horas de la madrugada.
Fiesta sorprendente, si hasta trasnochar no tiene importancia , total estamos relajados , todo es en vivo , allí está el o ella de carne y hueso que suda , baila, toma agua " que nos ayuda a humanizar a ese "famoso" y mas encima apoyado de un gran despliegue tecnológico que proyecta la correcta sensación de "programa estelar" , sin duda, convive con nosotros durante 6 días el embrujo festivalero ".
Y así una vez más nos rendimos ante la delicia de sentirnos todos unidos a las emociones que los distintos artistas nos despiertan con sus frenéticos movimientos voces y sonidos.
Chile, está optimista, estamos siendo vistos por una gran cantidad de países, somos una plataforma importante, nos visitan los "grandes" los más "caros" los acogemos en medio de una ciudad "jardín" llena de lujos rodeada de edificios y palmeras que dan la sensación de estar en el paraíso.
Entonces como reaccionamos? como nos vemos? como compramos la idea festivalera? simplemente apropiandonos de la fiesta , organizada por algunos e informada por otros haciéndonos creer que somos Grandes e Importantes porque somos una ventana al mundo para aquellos que logran pisar un escenario tan importante como el nuestro."
Por esto y mucho más gracias Festival por darnos una manito para continuar viviendo"arriba de la pelota" como es la tónica de estos últimos tiempos.
"Chile es un festival, vivido desde Viña del Mar, la la la, la la la la... "
Y si usted quiere, continúa cantando, porque la verdad es que ya me aburrí de tanta vanalidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario