viernes, 11 de septiembre de 2009

Un 11 de septiembre


Septiembre un mes histórico, marcado a fuego con el número 11, donde la vida se juega y se pierde inesperadamente, un mes donde el recuerdo de lo "que pasó" aflora con homenajes, minutos de silencio, discursos, protestas, y coronas puestas en los lugares donde descansan aquellos que un día como el sañalado nos dejan, repentinamente con la sensación de orfandad

No tengo como hacerme la indeferente frente a esta fecha tan significativa para tantos, porque presisamente un 11 de septiembre, perdí a mi madre, no de muerte violenta , pero si de inesperada enfermedad terminal.

Su partida fue silenciosa , ella era una ciudanana chilena que pasaba al registro de los fallecidos, había elegido este especial día por alguna razón que no alcanzo a comprender.


Lo cierto es que yo, me he convertido en una persona más que llora, que rinde homenajes, que pone flores en su tumba y que en oración entrega su discurso de agardecimiento por lo que ella fue y significó en mi vida.

Si porque mi madre fue una santa, representó el Amor incondicional, las garras y las fuerzas para estar siempre a mi lado, jamás detrás ni delante, siempre junto a mí. Ella representó lo mejor de la Humanidad, guiandome todas las veces que se daba cuenta de mi desvio, con serenidad, pasión, ternura y una Generosidad sin límites.

Cuando recuerdo su presencia con todas estas bondades, no me queda más que enmudecer, Caer en la cuenta de su entrega me desarma . Ella lo fue todo en los cortos 21 años que vivimos juntas

Permiteme madre amada darte las gracias por todo lo recibido, por hacer de mi persona la mujer y madre que hoy soy, por regalarme la vida y por representar en carne viva el Amor, tan parecido y cercano al Amor de Dios.

Hoy me sumo a los homenajes y recuerdos del 11 de septiembre, con la misma sensación de perdida , dolor y añoranza de muchos que hoy lloran quizás no con la misma intensidad, pero que
jamás borrarán de su alma el recuerdo de sus seres queridos que hoy ya no están.

Gracias madre , por ser tú y solo tú, la persona que me dió la oportunidad de llamarte mamá . Tu partida no ha sido un impedimento para alejarte de mí. y siempre diré "Cada dia que pase será uno menos de soledad, nos veremos en la Eternidad."




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